En todas partes se habla de la digitalización, y ahora también en el sector inmobiliario. ¿Por qué es así?
El sector inmobiliario sigue estando a la cola de la digitalización en comparación con otros sectores; sin embargo, muchos expertos creen que tiene un enorme potencial para beneficiarse de la transformación digital y, por lo tanto, para ponerse a la altura de otros sectores. Un indicador importante es el gran número de actores y empresas que participan en los procesos, así como la ausencia de plataformas digitales transversales.
Las empresas del sector inmobiliario se enfrentan cada vez más a la digitalización, y eso es bueno. Dado que las tecnologías digitales están eliminando cada vez más las barreras de entrada al mercado, es importante que nos familiaricemos con el tema y nos aseguremos de que Global Real Estate esté preparado para tener éxito en el futuro.
Al principio de nuestra conversación mencionó el desarrollo de la estrategia corporativa digital. ¿Cuál es la importancia de esa tarea dentro de su función?
Es una prioridad absoluta. El hecho es que se debe tener una estrategia holística antes de centrar la atención en iniciar proyectos específicos. Esta estrategia debe seguir un plan compuesto por bloques fundamentales perfectamente coordinados. Creo que es muy importante reconocer que la digitalización no es una cuestión puramente informática, sino que debe abordarse de forma transversal y abarcar múltiples aspectos, desde la mentalidad y la cultura de gestión hasta la capacidad de innovación y unos métodos de colaboración ágiles y eficaces, pasando por una clara orientación al cliente. Ello supone, por tanto, acabar con las estructuras de compartimentos estancos, tanto en lo que se refiere a los procesos internos como a la cooperación interdisciplinaria e interempresarial. Para tener éxito, también es fundamental el apoyo de la dirección. Dado que los responsables de Credit Suisse Asset Management apoyan activamente la digitalización y le dan los recursos y el margen de maniobra necesarios, nuestros esfuerzos en el frente digital contribuirán de forma sostenible a la creación del valor añadido que he comentado anteriormente para los distintos grupos de interés.
¿Qué iniciativas podrían formar parte de esa estrategia de digitalización?
En primer lugar, es necesario crear una base para la digitalización que incluya, en particular, una plataforma integrada de sistemas y bases de datos que no se vea afectada por la discontinuidad de los medios de comunicación, que cubra todos los elementos clave de la cadena de valor inmobiliaria y que sea lo suficientemente ágil como para responder a las necesidades futuras. Un sólido modelo de datos de la empresa es de crucial importancia para gestionar y utilizar los datos y documentos de una manera útil y estructurada.
Sobre esta base, las oportunidades que ofrecen las nuevas tecnologías digitales son realmente muy diversas. Dentro del sector inmobiliario, la conexión del mundo de los edificios físicos con su gemelo digital crea oportunidades únicas. Tomemos dos ejemplos. Uno es el tema de la inteligencia artificial (IA). Ya se está utilizando con éxito en algunos ámbitos como, por ejemplo, la gestión de datos y contratos. Sin embargo, el potencial que ofrece la tecnología es mucho mayor y estoy convencido de que muy pronto se utilizará para el análisis de carteras enteras. El hecho es que la IA puede ayudar a estructurar los procesos de manera más eficiente y a organizar ingentes cantidades de datos para tomar decisiones basadas en datos y minimizando los riesgos.