En primer lugar, debemos echar un vistazo a la industria del seguimiento de índices, la precursora de los ETF. Este sector se disparó porque los inversores se negaron a aceptar las elevadas comisiones que cobraban los gestores de activos. Aun cuando estos superaban el rendimiento, sus comisiones podían reducir significativamente la rentabilidad a lo largo del tiempo debido a efectos acumulativos. Los instrumentos de seguimiento de índices les permitieron obtener una exposición rápida al mercado pagando una fracción de las comisiones que cobraban los gestores de activos.
A continuación aparecieron los ETF. A diferencia de los fondos indexados, que son fondos de inversión abiertos tradicionales, los ETF son valores que cotizan en bolsa. Este enfoque conlleva muchos beneficios. Mientras que un fondo índice solo se negocia una vez al día, los ETF se pueden negociar durante todo el día, lo cual permite límites de precio, órdenes de limitación de pérdidas y otras técnicas de negociación.
Pero los ETF ofrecen mucho más que comisiones bajas. Esta industria aporta una increíble cantidad de innovación. Y está evolucionando a gran ritmo. Por ejemplo, los ETF demostraron su resiliencia durante el dramático descalabro bursátil generado por la COVID-19 en 2020, cuando se agotó rápidamente la liquidez de los bonos corporativos Investment Grade y los bonos High Yield. Los ETF demostraron su valor, probando que podían ser un instrumento fiable cuando otros instrumentos perdían liquidez. Incluso sirvieron para respaldar la determinación de precios en el mercado de bonos, ayudando así a emparejar a compradores y vendedores a un precio que fuese aceptable para ambos.
La industria de los ETF se fortaleció más que nunca con la pandemia. Tanto los fondos indexados cotizados (ETF) como los no cotizados registraron entradas netas históricas en 2021.
Los ETF han demostrado ser un instrumento financiero sólido
Muchos tipos de inversores utilizan los ETF para diversos propósitos. Los motivos ya no se reducen a buscar una exposición pasiva a un índice o a reducir comisiones. Muchos de los que compran ETF son inversores activos y proceden de diversos ámbitos.
Hay inversores que quieren negociar un índice frecuentemente. También están los que quieren comprar y mantener. Por otro lado, hay inversores institucionales, como los gestores de cartera que quieren inclinar tácticamente su asignación de activos o desarrollar exposición de forma rápida y económica en una determinada área del mercado. Los ETF también los pueden utilizar los equipos de activos múltiples como componentes para estrategias de asignación de activos o de asignación de riesgos.
La innovación alcanzada en la industria de los ETF en los últimos años ha sido impresionante. Algunos ETF se han diseñado específicamente para abordar determinados factores de riesgo. También se han aplicado diversas técnicas de construcción para ayudar a dejar de lado algunas de las desventajas de los índices ponderados por capitalización tradicionales.
Los ETF promueven la inversión sostenible
Actualmente, la industria está bien establecida. El mercado europeo de los ETF OICVM* ya ha crecido hasta alcanzar la desorbitante suma de 1,5 billones USD. Y se espera que esta cifra siga creciendo debido a la increíble cantidad de innovación que ha permitido la expansión y desarrollo continuos de la industria.
Una de las tendencias más interesantes que ha surgido ha sido el uso de los ETF en la inversión sostenible. Los ETF se pueden utilizar para seguir eficientemente las sólidas puntuaciones de ESG. También es fácil implementar la construcción cuantitativa de carteras con los ETF. Por consiguiente, durante los últimos años hemos visto un aumento drástico en los productos con temática ESG e integración ESG.
El siguiente gráfico muestra lo importante que se ha vuelto la industria europea de los ETF para la inversión sostenible. Casi una cuarta parte de los activos bajo gestión invertidos en ETF están asignados a estrategias que promueven la inversión sostenible (a fines de 2021).
Sin embargo, el 60% de las nuevas entradas en ETF se han recibido mediante ETF vinculados a la inversión sostenible, lo que demuestra lo rápido que la inversión sostenible está creciendo en la industria de los ETF.