El Acuerdo de París sobre el cambio climático establece el objetivo de lograr la neutralidad climática para 2050. Global Real Estate quiere alcanzar este objetivo con su cartera inmobiliaria para 2040, es decir, diez años antes de lo que contempla el acuerdo. En consecuencia, cada vez es más importante considerar aspectos de sostenibilidad a lo largo de toda la cadena de valor. Este cambio nos beneficia a todos: al medio ambiente gracias a un clima más saludable, a los arrendatarios debido a una mejor calidad espacial y un menor consumo de energía, y a los inversores a causa de las oportunidades de obtener más rentabilidad. No supone ninguna sorpresa, por tanto, que las inversiones sostenibles actualmente estén siendo objeto de una fuerte demanda y que estén creciendo a tasas anuales de dos dígitos, siendo las inversiones inmobiliarias particularmente codiciadas.
Potencial con respecto a inmuebles nuevos y existentes
En un edificio nuevo se aplican los estándares más estrictos posibles para garantizar una operativa de neutralidad climática, que abarca desde sistemas fotovoltaicos y aislamiento hasta la elección de las fuentes de energía. El presupuesto energético del edificio se gestiona de forma integral mediante sensores inteligentes; y el consumo de energía y las emisiones de CO2 se miden, analizan y reducen a largo plazo utilizando medidas sistemáticas.
Las instalaciones existentes también juegan un papel fundamental en los debates sobre el clima porque pueden realizar una aportación importante a la reducción de emisiones de CO2 mediante la mejora de la eficiencia a corto plazo y las renovaciones a largo plazo.
Los certificados de sostenibilidad como indicador
Además de centrarse sistemáticamente en la sostenibilidad y de optimizar los inmuebles, es esencial ofrecer transparencia a los inversores. Los sellos de construcción reconocidos, los índices de referencia y los informes de sostenibilidad son algunos de los elementos que ayudan a aportar claridad. Los indicadores de energía también son útiles, sobre todo si cubren un periodo prolongado. Además, actualmente es habitual llevar a cabo un proceso de diligencia debida con respecto a la construcción cuando se compra un inmueble, que es otra forma de comprobar su sostenibilidad.
Global Real Estate también hace uso de su sello de calidad interno «greenproperty», que se lanzó en 2009. Evalúa más de 50 criterios ESG1 mediante un proceso de auditoría independiente y certificado. Global Real Estate aplica este exhaustivo sello a los nuevos edificios de forma obligatoria para todos los productos de inversión inmobiliaria. El estándar «greenproperty» se basa en otros sellos del sector inmobiliario, que incluyen Minergie de Suiza o la conocida referencia LEED que se utiliza en países de habla inglesa. También se han incorporado los estándares SIA aplicables.
Mayor transparencia gracias a la regulación
Dentro del Plan de acción sobre finanzas sostenibles de la Unión Europea (UE), la Comisión Europea ha establecido un marco exhaustivo con un sistema de clasificación estandarizado para las inversiones sostenibles. Dicho marco urge al sector financiero a ser transparente con respecto a la identificación de los riesgos de sostenibilidad relacionados con el clima en la elaboración de sus informes. Para el centro financiero suizo, la Autoridad Suiza Supervisora del Mercado Financiero (FINMA) está haciendo que la transparencia vinculante y las obligaciones de divulgación de información sean la norma.
El objetivo de los cada vez mayores requisitos regulatorios es garantizar una mejor comparabilidad de las inversiones financieras sostenibles. Es importante brindar a los inversores información transparente dando a conocer las características sostenibles de los productos financieros.