Pionero en inmuebles sostenibles
Credit Suisse Asset Management ha definido criterios de sostenibilidad sectoriales específicos para sus productos inmobiliarios sostenibles. Como índice de referencia ESG para las inversiones inmobiliarias directas e indirectas se utiliza el Global Real Estate Sustainability Benchmark (GRESB), que analiza y valora mediante evaluaciones anuales el rendimiento ESG. En el caso de Credit Suisse Asset Management hay 14 productos del segmento Core/Core Plus que participan en las evaluaciones del GRESB.
El área inmobiliaria de Credit Suisse Asset Management ya cuenta con una experiencia de muchos años en la implantación ESG. Las principales iniciativas de la estrategia de sostenibilidad incluyen la certificación de edificios, la optimización energética de edificios y la medición del rendimiento ESG mediante el GRESB.
Al margen de los estándares de mercado usuales de etiquetas sostenibles para los inmuebles como LEED, BREEAM, DGNB, Minergie, etc., Global Real Estate ha desarrollado con ‘greenproperty’ su propio estándar ESG integral que está en uso desde hace más de diez años. En el ámbito de optimización de edificios, Credit Suisse se basa en la colaboración a largo plazo con Siemens que entra en juego a la hora de la optimización operativa a corto y largo plazo y para las renovaciones a largo plazo y de capital intensivo. De este modo ha podido aumentarse de forma significativa la eficiencia energética y reducirse en más del 10% las emisiones perjudiciales de CO2 para el clima. Los resultados del GRESB muestran una vez al año el éxito de las medidas de sostenibilidad individuales en comparación con el mercado inmobiliario y con una serie de grupos comparativos específicos.
La puntuación GRESB (máx. 100 puntos) o las estrellas GRESB (máx. 5 estrellas) indican el grado de rendimiento ESG o de sostenibilidad junto con los datos convencionales de rendimiento económico.
Basándose en la exitosa aplicación de los criterios ESG en las inversiones inmobiliarias, el objetivo es aprovechar esta experiencia e integrar los criterios ESG, hasta finales de 2020, en prácticamente todos los fondos de inversión de acciones, bonos y clases de activos múltiples de gestión activa.